Bajada del Ebro

Como cada año al llegar la fecha de Santiago,los intrepidos rinconeros,rememoran los tiempos en los que ayudados de barcas,nuestros abuelos se lanzaban al Ebro(en su caso a pescar anguilas,etc).
Y como si de piratas se tratase,se adentran en sus aguas infestadas de ....siluros gigantes sedientos de sangre riojana.


Desde Doria,se dejan arrastrar suavemente por la corriente hasta llegar al temido ramillo,sus fuertes corrientes hacen estragos en las embarcaciones,y no son pocos los capitanes que abandonan su nave abordando a sus peligrosos adversarios.

Pasado el tramo mas peligroso,los tripulantes descansan en aguas mas tranquilas dejandose a la bebida ,sin acordarse de los peligros que el rio esconde en sus profundidades.
Al llegar al puente, el gentio les recibe como verdaderos heroes y ayudan a las tripulaciones caidas a recoger los restos de los naufragios.....el año que viene otra vez,asi que el rio tiene que quedar limpio.